Características generales del cactus ornamental Nido de Pájaro, Mammillaria decipiens camptotricha
Mammillaria decipiens camptotricha es una subespecie del cactus Mammillaria decipiens antes considerada una especie aparte (Mammillaria camptotricha). Se caracteriza fundamentalmente por desarrollar largas y cónicas mamilas mucho más pronunciadas. Además, es una planta muy apreciada or la belleza de la disposición de sus espinas que recuerdan mucho al nido de un ave (de ahí su nombre popular). Hay que aclarar que es una subespecie muy variable en cuanto al tamaño y número de las espinas y por esto, es común encontrar diferentes formas en el mercado (morfos). Esta planta es originaria del centro de México donde crece bajo la sombra de arbustos y árboles formando colonias muy compactas.
Esta subespecie desarrolla un tallo corto, suculento, verde intenso y globoso de +/- 8 cm de altura y +/- 5 cm de diámetro. El tallo desarrolla numerosos tubérculos cónicos de +/- 3 cm de largo en cuyo ápices se disponen pequeñas areolas que darán origen a las espinas.
El número y tamaño de espinas es muy variable ya que se han descritos diferentes morfos en la misma subespecie. Por lo general se desarrollan de 0 – 2 espinas centrales muy pequeñas y de 2 – 10 espinas radiales muy finas, aciculares, amarillentas – amarronadas y frágiles. Las espinas radiales pueden ser rectas o estar completamente curvadas; además miden de 0.5 – 2.5 cm de largo.
Las flores no son atractivas debido a su pequeño tamaño. Estas no logran casi sobresalir entre las espinas, miden +/- 1 cm de diámetro y presentan los segmentos de la corola blancos -amarillentos. Los frutos son pequeños (+/- 2 cm de largo), cónicos y presentan una coloración verdosa con tonos rojizos. Las semillas son pequeñas y presentan una coloración pardo – clara.
Consejos para el cultivo del cactus ornamental Nido de Pájaro, Mammillaria decipiens camptotricha
Mammillaria decipiens camptotricha es un cactus muy fácil de mantener siendo sus principales enemigos el exceso de humedad y algunas plagas. A continuación, sus cuidados básicos:
Iluminación:
Es necesario cultivarla en sitios muy iluminados; nunca expuesta a la luz solar directa. El sol intenso del mediodía quemará sus tejidos con facilidad. El cultivo en zonas muy umbrías provoca la etiolación de los tallos o parada del crecimiento.
Temperatura:
Esta especie es bastante tolerante a un amplio rango de temperaturas (2°C – 35°C) aunque prefiere crecer en climas cálidos donde las temperaturas se encuentren entre los 18°C – 30°C. No tolera las heladas.
Sustrato:
Necesita un sustrato muy poroso y mineral con muy poca materia orgánica. El óptimo drenaje es imprescindible en la supervivencia del sistema radical.
Frecuencia de riego:
Requiere de muy poca agua para crecer y por esto, un exceso de agua es fatal para sus raíces. Se recomienda regar cada 10-15 días siempre que el sustrato este completamente seco. También la necesidad de agua se manifiesta con la ligera flacidez de las mamilas.
Plagas y enfermedades:
Es muy susceptible a las cochinillas, pulgones, ácaros, nemátodos del sustrato y moluscos. Es necesario plantarla siempre en sustratos desinfectados y aplicar plaguicidas específicos que eliminen rápidamente las plagas que aparezcan.
Multiplicación:
Se puede multiplicar mediante la separación de hijuelos basales o por semillas.
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